Probablemente sí a un analista del mercado financiero se le hubiera planteado hace tan sólo 20 o 25 años la posibilidad de operar con productos de acceso al mercado de valores de manera individual desde el propio domicilio del usuario, la respuesta de dicho analista, en el mejor de los casos, hubiera sido de incredulidad.
La situación anterior es perfectamente normal, debemos tener en cuenta que pocos, realmente muy pocos, podían llevar a prever el peso que la banca a través de Internet iba a lograr en tan sólo dos décadas, sin embargo hoy en día los broker de banca online no sólo son una realidad sino que, tal y como indicaba una encuesta realizada a finales del pasado año 2012 a nivel europeo, resultan ser un producto al alza muy tenido en cuenta cada vez en mayor medida por el pequeño inversor.
La respuesta a este crecimiento la tenemos que encontrar necesariamente en la eficacia de la implementación de las herramientas que componen las diferentes plataformas de acceso al mercado de valores existentes.
Estas herramientas permiten, a partir de costes realmente asumibles, que los usuarios accedan al citado mercado de valores de manera simple, por lo general muy intuitiva con el valor añadido de no exigir grandes movimientos patrimoniales en absoluto para participar de dicho mercado.
La oferta como decimos no sólo es cada vez más extensa sino que, en sintonía con el crecimiento exponencial del uso de la banca por Internet, resulta cada vez más demandada y presente dentro de los productos financieros más estimados por los usuarios, una realidad creciente que en nuestro país busca acercarse a la media de usuarios que un buen número de países europeos ya posee.